La Última Cena es una de las escenas más emblemáticas del cristianismo, representando el momento en que Jesús compartió su última comida con sus discípulos antes de su crucifixión.
Este evento es significativo y central en la fe cristiana.
Esta obra maestra no solo destaca por su composición y uso del espacio, sino también por su profundo impacto en la cultura y el arte a lo largo de los siglos.









